Padres buenos hay muchos, buenos padres hay pocos. No creo que haya cosa más difícil que ser un buen padre. En cambio no es difícil ser un padre bueno. Un corazón blando basta para ser un ...
El padre bueno amanteca la voluntad de su hijo ahorrándole esfuerzos y responsabilidades. El buen padre templa el carácter del hijo llevándolo por el camino del deber y del trabajo.
La caridad no es una herramienta para cambiar el mundo, sino para perpetuarlo en lo peor y ahondar más las diferencias. Entre lo bueno del Padre Ángel es que los ricos se fían de él un poco de ...